Snowfall of Salt

La ciudad de La Rochelle y sus alrededores están cargados de historia e inspiran la imaginación. Al pasear por el paseo marítimo, la mirada se fija en extraños objetos de hierro que emergen del agua para ser utilizados en la ostricultura. Las estructuras parecen místicamente invadidas por algas y otra vegetación. Luego la mirada se dirige a estructuras más grandes que surgen del agua: búnkeres de guerra. Forman parte de la historia, rodeados de vegetación marina. Los búnkeres que sobresalen del mar recuerdan a trincheras, búnkeres y casas abandonadas en los bosques de Lituania. En el paseo marítimo de La Rochelle, la gente toma el sol y trepa por estas estructuras de cemento, encontrándoles nuevos usos. La naturaleza las asimila poco a poco. Este proceso se manifiesta en una ecología híbrida, donde personas, edificios y plantas coexisten en dependencia unos de otros. ¿En qué se convertirán estas estructuras en el futuro?