Entre Túnez y Brasil, el escritor e intelectual Jean Duvignaud (1921-2007) se abrió al mundo. Su obra, en la que resuenan las voces de la literatura y la filosofía, el teatro y la antropología, la historia y la sociología, el psicoanálisis y la poesía, la pintura y la arquitectura, desafía a comentaristas y biógrafos. Saltando de una línea de cresta a otra, "asomándose a las cosas futuras", como le gustaba decir en palabras de Montaigne, siempre ha preferido estar atento a lo inesperado antes que conformarse con el estudio de certezas estructurales ordenadas. En estos lugares de revelación, que seguirán siendo para siempre los polos magnéticos de su pensamiento, Jean Duvignaud ha podido dar rienda suelta a una intuición que forma parte de él desde hace mucho tiempo: la de la vehemencia de las prácticas imaginarias. Intermondes Con motivo del centenario de su nacimiento, estudiantes, compañeros de viaje y amigos se reunieron en el Centro de La Rochelle, que él contribuyó a crear en 2003, en forma de Maison des Humanités, para ofrecer nuevas lecturas de su pensamiento abundante y siempre estimulante a la hora de cuestionar la celebración y la subversión, la anomia y la insurrección de lo posible, la creación artística y lo imaginario.Intermondes Editado por Laurent Vidal, con el apoyo de la Universidad de La Rochelle.

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Folleto para la exposición Les Chemins de Yémoja de Laeila Adjovi, comisariada por Salimata Diop.

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